07 noviembre 2012
Como ser multiplicador
09 octubre 2012
Cuestion de ADN
06 septiembre 2012
Factores
Mientras celebramos con entusiasmo un pequeño aumento en algunas congregaciones, en realidad el cristianismo evangélico tiende a convertirse en una minoría en este país. Pensando en el porque de esta situación, concluyo que algunos de los factores detrás de esta realidad son:
El factor multiplicación versus suma: Para que un hombre o una mujer puedan reproducirse se requiere que lleguen a la edad de 12 o 13 años. De esa edad en adelante la gente puede procrear y aunque algunos procuran evitar los embarazos, o los interrumpen, el número de nacimientos supera el de muertes. Pero en el ámbito de la iglesia una persona puede pasar más de 13 años sin reproducirse espiritualmente. Los mas dinámicos lo que hacen es invitar a sus amigos a un culto. Entonces mientras la población multiplica, nosotros sumamos.
El factor suma versus suma: Hace años oí a los expertos decir que cada día entraban a Houston 1,000 hispanos. No se cuantos llegan hoy, pero las iglesias no crecen a un ritmo de 30,000 personas por mes. Entonces, mientras la inmigración suma grandes cantidades, nosotros lo hacemos en cantidades pequeñas.
El factor minoría versus mayoría: En nuestras congregaciones un pequeño grupo se encargan de todo, la mayoría solamente asiste. La lógica dice que si solamente una minoría de la población se pudiera reproducir, la población comenzaría a disminuir. Entonces mientras la población es activa, nosotros somos pasivos.
El factor humano versus el divino: En vez de buscar a Dios para rogarle por la conversión de las almas, buscamos un método, un curso, un material, o una formula que resuelva la situación, pero solo el Espíritu Santo puede conquistar la fortaleza interna de las personas. Entonces, mientras la gran comisión requiere la intervención divina, nosotros buscamos lo humano.
31 julio 2012
Consumidores
Hace años una pareja visitó un par de veces la congregación donde soy pastor y después de un culto les pregunte si pertenecían a alguna iglesia, “Si, pero estamos buscando otra para cambiarnos” Y ¿Por que se quieren cambiar? Pregunté y respondieron, “Nuestra iglesia acaba de moverse a una localidad muy grande y tenemos que caminar mucho desde el estacionamiento al auditorio. Buscamos algo mas cómodo.” Asombrado, los observe para ver si tenían algún impedimento físico, pero se veían bien y caminaban sin impedimento.
En otra ocasión un miembro de la iglesia me informo que había visitado otra iglesia y había decidido cambiarse porque allá le “sonaba mejor la guitarra.” Lo que quería decir es que le gustaba más la predicación del otro pastor.Otra pareja que visito nuestra iglesia se quería cambiar porque ya llevaban mucho tiempo en la misma congregación. Espacio me faltaría para compartir ejemplos de porque algunos cambian de iglesia. Cada uno tiene su razón, pero en el fondo el problema es el mismo. Son creyentes consumidores.
Así como un cliente no tiene fidelidad para Kroger, o H.E.B. el creyente consumidor no tiene fidelidad a ninguna congregación y cuando se mueve, lo hace en busca de algo para consumir. Su pregunta inconsciente es, ¿Qué hay en esta iglesia para mí? Olvidando que Cristo nos llama a un compromiso, a servir a Dios y a la gente, a desarrollar relaciones profundas, a superar diferencias con otros hermanos, y a ser miembros los unos de los otros.
Antes de lamentar la perdida de uno de estos miembros, o de alegrarse por su llegada debemos preguntarnos, ¿Será posible cumplir la gran comisión con esta clase de creyentes? El sentido común nos dice que seguir a Cristo requiere algún tipo de sacrificio y los que solo buscan algo para consumir, pues van a evitar el sacrificio.
Leia Mais…02 julio 2012
El mover de Dios
30 mayo 2012
Oración estratégica 2
Continuando
con el tema de pensar y orar estratégicamente debemos mirar a Jesús como una
persona estratégica en todo lo que hacia. Por ejemplo. Cuando estuvo frente a
las multitudes contemplando no solo la cantidad de gente, sino la condición
espiritual en que se encontraban, les dijo a sus discípulos. “A la verdad la
mies es mucha, mas los obreros pocos. Rogad, pues al Señor de la mies, que
envié obreros a su mies.” Mateo 9:36-38
Jesus comparo las multitudes a un campo listo para la cosecha, pero con pocos obreros para recogerla. La solución, según el mismo, era rogar al Señor que enviara obreros a su mies. Pero además de orar y hablar, Jesus preparo y envió doce discípulos.
La tarea era tan grande que mas tarde Jesus preparo a otros 70 discípulos y antes de enviarlos volvió a decir: “La mies a la verdad es mucha, mas los obreros pocos; por tanto, rogad al Señor de la mies que envié obreros a su mies.” Lucas 10:2
En la manera de Jesus proceder se observa claramente dos elementos estratégicos: El entrenamiento continúo de obreros y la oración continúa por más obreros. Entrenar y orar por más obreros era la estrategia de Jesús. Es importante notar por el contexto que estos obreros no fueron entrenados para ministrar dentro de un edificio los domingos, sino para servir y proclamar el evangelio afuera en las aldeas y las casas donde vivían las multitudes.
Sin obreros y sin entrenamiento no vamos a conquistar una ciudad porque las multitudes viven en constante multiplicación y la maldad también se multiplica constantemente. Por eso Jesus nos apura, “La mies a la verdad es mucha, mas los obreros pocos. Rogad, pues al Señor de la mies que envié obreros a su mies.”
01 mayo 2012
Oración estratégica
02 abril 2012
Enfoque
Algunos amigos dicen que me he vuelto popular por el dicho, “No debemos perseguir dos conejos a la vez porque no vamos a agarrar ninguno de los dos”. Es que me frustran las reuniones donde hablamos de varios asuntos y no concretamos ninguno. El punto es que lo que logremos en la vida es determinado en gran parte por nuestro enfoque.
En estos días alguien me dijo, “No podemos silbar y cantar a la vez”, y me impactó porque a veces trato de cantar y silbar al mismo tiempo y ¿Sabe que logro? Que ni canto, ni silbo.
¿Por qué necesitamos enfocarnos, o dejar de perseguir dos conejos? Porque somos limitados en el tiempo y en el espacio. En otras palabras, no vamos a vivir para siempre, no podemos estar en varios lugares a la vez, no tenemos todo el dinero, ni tampoco tenemos todo el conocimiento.
Supongamos que su visión es entrenar y multiplicar discípulos y esta muy contento haciendo esa tarea, pero viene un amigo y le dice, “Dios me ha bendecido y quisiera pagar para que tengas un programa de televisión.” ¿Qué harías? ¿Tratar de cantar y silbar a la vez?
Hacer discípulos es una tarea que requiere tiempo y mucha interacción personal. Mientras que un programa de televisión implica mucha creatividad, conseguir músicos, personas para entrevistar, ayudas visuales, maquillaje, selección de temas, mucha coordinación, trabajo de preparación y de filmación.
Gracias a Dios vivimos en un país libre donde hay muchas oportunidades y recursos, pero el siervo del Señor debe enfocarse. Los programas de televisión y de radio son excelentes herramientas pero tenemos que discernir cuando de veras estamos listos para usar esos medios.
01 marzo 2012
El Supremo Llamamiento
En el supuesto caso de que Vd. recibiera dos ofertas de trabajo, una con un salario de $ 4,000 dólares mensuales más beneficios y otra de $ 6,000 con iguales beneficios, creo no equivocarme al pensar que aceptaría la segunda.
En términos bíblicos Vd. tendría dos llamados y necesitaría escoger uno. El apóstol Pablo también tuvo dos llamados, el del judaísmo y el de Cristo. En el llamado judío tenia mucho que ganar porque pertenecía a la tribu de Benjamín, tenia gran disciplina para someterse a la ley, era conocedor de la historia y las escrituras judías, y su reputación era irreprochable.
En el llamado de Cristo solo se le ofrecían riesgos. Por un lado, los cristianos desconfiaban de el porque era perseguidor de los discípulos y por el otro, los judíos estaban tratando de desaparecer el movimiento cristiano. Sin embargo Pablo escogió el llamado de Cristo y años después dijo que todo lo que tenía lo había considerado como basura por seguir a Cristo y se refirió a ese llamado como el supremo llamamiento.
El supremo llamamiento no es exclusivo para el apóstol Pablo, es para todos y consiste primero en pertenecer a Cristo. No consiste solo en decir que uno tiene a Cristo, sino en que Cristo me tiene a mí, me posee, me domina.
El supremo llamamiento también consiste en ser más y más como Cristo, parecerse a El en el carácter. No solamente hablar de Cristo, sino en reflejar al Cristo interior que reina en el corazón.
También consiste en involucrarse en la gran comisión expresada en Mateo 28:18-20. No se trata solo de plantar iglesias y ofrendar para las misiones, sino en hacer discípulos teniendo en cuenta que un discípulo es una persona entrenada para obedecer lo que Cristo ha mandado y entrenar a otros para que entrenen a otros.
06 febrero 2012
Cuatro Necesidades
Cuando un predicador va a preparar un mensaje, surgen dos opciones: La primera, predicar el mensaje que la gente quiere oír y así saldrán contentos del servicio. La otra opción es predicarles lo que necesitan oír y posiblemente no salgan muy contentos.
Es como la madre que va a preparar la comida de sus hijos. También tiene dos opciones: Una, darles lo que le gusta comer, que seguramente no es lo más saludable, y la otra preparar lo que necesitan que tal vez no les guste.
Dios también tiene las mismas opciones. Por ser todo poderoso puede darnos lo que queremos, pero como también es perfecto, siempre nos va a dar lo que necesitamos porque por su perfección busca siempre nuestro bien.
Por ejemplo. Sin oxigeno no podemos vivir mas que unos minutos, pero Dios ha sido generoso al rodear la tierra de una burbuja de aire que tiene mucho oxigeno, pero hay gente que prefiere fumar, o respirar sustancias que los envenenan. Sin agua tampoco podemos vivir por mucho tiempo, pero Dios también ha sido generoso al crear más agua que tierra seca. Sin embargo, hay quienes prefieren beber cerveza, licores y sodas.
Entonces, la pregunta clave para el pastor que esta frente a una congregación es, ¿Qué es lo que la gente necesita? Creo que hay diferentes respuestas a esta pregunta, pero en Marcos 1:14-17 encontramos cuatro llamados de Cristo que corresponden a cuatro necesidades espirituales de la gente: “…Arrepentíos…”, “…creed en el evangelio.”, “…Venid en pos de mi”, “…haré que seáis pescadores de hombres.”
Estos cuatro llamados se dirigen a dos audiencias: La de los no creyentes que necesitan arrepentimiento y fe en Cristo y la de creyentes que necesitan transformar su carácter a semejanza de Cristo y entrenarse para pescar hombres.
04 enero 2012
Que el apostol Pablo nos entrene
Cuando yo tenía 21 años, los líderes de mi denominación rentaron una casa en un pueblo vecino y me dieron dinero para mandar a hacer unas bancas y un pulpito. Ellos estaban entusiasmados porque el Señor me había llamado y deseaban plantar nuevas iglesias.
Yo viajaba los sábados a visitar y el domingo tenia dos cultos. Al cabo de un año la asistencia era de siete a nueve personas y ninguno tenia interés en bautizarse. Yo me sentía fracasado y tire la toalla. Hoy pienso que si el apóstol Pablo me hubiera entrenado, habría hecho mucho mejor.
Imposible que Pablo nos entrene para esparcir el evangelio, pero en Hechos 19:8-10 se nos cuenta lo que el hizo partiendo de Efeso como centro de operaciones.
Primero buscó la gente con la que tenia conexión cultural y religiosa. El verso ocho dice, “Entrando en la sinagoga hablo con denuedo por tres meses” No rento ningún lugar, no predico sermones a las sillas, pero hablaba con denuedo del Reino de Dios.
Los versos nueve y 10 dicen que cuando algunos de la sinagoga se endurecieron, Pablo se aparto con sus discípulos a la escuela de Tirano y continuo con ellos por dos años. O sea que en el momento oportuno, comenzó a discipular en otro lugar posiblemente rentado, o prestado. Obviamente no se trataba de un discipulado teórico porque no tenían libros, ni Biblia impresa. Tenia que ser instrucción oral y entrenamiento practico que producía discípulos que se reproducían como conejos.
El verso 10 termina, “…de manera que todos los que habitaban en Asia, judíos y griegos, oyeron la palabra del Señor Jesus.” ¡Excelentes resultados!
Estoy seguro que otro elemento de la estrategia de Pablo, no mencionado, era la oración ferviente. Entonces la estrategia seria: Evangelismo intensivo + Discipulado practico + Oración ferviente = Multiplicación.